Los acontecimientos astrológicos de este año 1999 son tan peculiares que
ningún astrólogo, creo, aunque sea por su sola curiosidad personal, ha
resistido a hacer hipótesis sobre qué pueden significar estas
configuraciones. Ante todo, me parece digno de nota un paralelismo con
Nostradamus: como todos saben, el célebre adivino fue sobre todo un astrólogo
y tengo que decir que me ha sorprendido leer las tan disparatadas
ihterpretaciones a su celebérrima Centuria X, 72 sin tener en cuenta este
específico y notable pasaje.
Este Centuria recita:
L ‘an mil neuf cens nonante neuf sept mois,
Du cje! viendra un grand Roy d’effrayeur:
Resusciter le grand Roy d’Angolmo¡s,
Avant aprés Mars regner par bon heur.
Se han formulado por doquier las hipótesis más disparatadas, más allá
del período harto preciso que se cita (el séptimo mes de 1999), sobre el
sentido de la palabra Mars, -la mayoría de las interpretaciones lo asocia
con la simbologia mitológica de Marte como Dios de la guerra y por lo
tanto con precisas referencias a acontecimientos bélicos-. Esto, en
parte, puede ser aceptable pero, como dije antes, Nostradamus fue sobre
todo un astrólogo y teniendo que fechar un acontecimiento situado en el
futuro, no habría tenido otro sistema que, efemérides en mano, indicar
los períodos planetarios. Siguiendo esta línea de pensamiento,
estrechamente astrológica, “antes y después de que Marte reine”
indica antes y después de que Marte se encuentre en un signo zodiacal por
él regido- cada signo tiene un Planeta que lo rige- y Marte reina en
Aries y en Escorpio. Si miramos las efemérides de 1999, podemos notar que,
desde el pasado enero, Marte está precisamente en Escorpio donde se
quedará buena parte del año. Notamos, además, que el 5 de mayo a las
21:33, en virtud de su movimiento retrógrado, Marte regresará a Libra
para volver a Escorpio, retomando el movimiento directo justamente, fíjese
Ud. - el 5 de julio a las 04:00. El 2 de septiembre a las 19:30, por fin,
dejará Escorpio para pasar a Sagitario. El curso de Marte para todo el
1999 es extremadamente interesante porque, a causa de su movimiento, a
menudo formará la oposición con Saturno (que se encuentra a 180° de
distancia, primero en Aries y luego, desde el 1 de marzo pasado, en Tauro):
en la antigúedad Marte fue definido “Pequeño Maléfico” mientras
Saturno “Gran Maléfico” subrayando la negatividad del periodo
precitado. En la práctica, si tomamos por buena la palabra “par bon
heur” como “par bonheur”, es decir “afortunadamente”, se puede
hipotetizar, con cierta seguridad, que Nostradamus haya querido subrayar
que el periodo de Marte en Escorpio sea particularmente dichoso no tanto
para la humanidad, sino por el sentido intrínseco del Planeta, o sea dará
lo mejor de si, con la exaltación de los valores de agresividad, guerra y
sadismo (Marte en Escorpio es particularmente fuerte, mucho más que en
Aries, por cuanto a la pura agresividad típica del Planeta, se une la
inteligencia estratégica y el sadismo, a menudo un fin en sí mismo, típicos
del signo de Escorpio).
Otro acontecimiento digno de notar de este año es la famosa “Gran Cruz
en signos fijos”:
Saturno, en oposición a 180° de distancia de Marte, también está, al
mismo tiempo, en aspecto negativo de 90° a Neptuno primero y luego a
Urano que se encuentran en Acuario y el próximo agosto, a 180° de
distancia de Urano irá a colocarse el eclipse total de Sol en Leo. Esta
Gran Cruz, como han subrayado justamente algunos astrólogos, reproduce
otra Gran Cruz similar ocurrida poco antes de la II Guerra Mundial y
desafortunadamente los tristes acontecimientos de estos días parecen
confirmar la posibilidad de que se repitan acontecimientos igualmente
catastróficos. La guerra en Kossovo se inicia con el primer ataque, por
parte de la OTAN, el 24/3/99 a las 18:45, con dos planetas retrógrados,
Mercurio y Marte. Mercurio estuvo retrógrado a partir del pasado 10 marzo
a las 9:12, por tanto, todas las negociaciones que se emprendieron a
partir de esa fecha estaban destinadas al fracaso, dado que, con esta
fase, hay posibilidad de que se pierdan comunicaciones importantes o que
las mismas sean mal interpretadas. iEfectivamente, justo el día siguiente,
11 de marzo, fracasa la misión del enviado de los Estados Unidos, Richard
Holdbroke pero sobre todo fracasa la Conferencia otra vez entre serbios y
kossovares iniciada el 15 del mismo mes! El 18 de marzo, a las 13:42 también
Marte se pone retrógrado y el movimiento hacia atrás del planeta rojo a
menudo acompaña las grandes disputas sin que sean valoradas, sin embargo,
suficientemente a pleno las posibles consecuencias. Aquel mismo día, en
efecto, la delegación del Kossovo firma el acuerdo sobre la autonomía de
la región y sobre el envío de 28.000 soldados de la OTAN. Dado que la
delegación serbia no firmó, los acuerdos fueron suspendidos. El
principio del ataque, además, ocurrió con la fase de Luna creciente -
fue justo el día del primer cuarto - que ya de por sí es índice de que
el conflicto no habría sido así “relámpago” y eficaz como se esperó,
sino que, en cambio, habría dejado la vía a una escalada de
acontecimientos destacados por la Luna misma: efectivamente el
empeoramiento de la situación se produjo en el momento en que la Luna se
convirtió en Llena, el 31 de marzo, y, probablemente, irá atenuándose,
con un próximo momento de crisis señalado por el último cuarto el 9 de
abril, hasta la próxima Luna Nueva, el 16 de abril, aunque es cierto que
esto no necesariamente indicará el fin del conflicto, sino más
presumiblemente una simple tregua. Marte aquel día ya dio señales de los
efectos de la próxima Gran Cruz: ya en oposición, aunque amplia, a
Saturno, estaba en cuadrado a Urano y cerca de dos días después la Luna,
pasando por Leo, habría cerrado la Cruz Cósmica.
Otro aspecto digno de nota es que la ex-Yugoslavia pertenece al signo de Cáncer,
donde justo aquel día se encontraba la Luna, regente precisamente del
signo de Cáncer, en aspecto negativo a Júpiter, en conjunción al Sol en
Aries. Júpiter, a su vez, es regente de Sagitario, signo al cual
pertenecen los Estados Unidos. ¿Podría haber una representación mejor,
bajo el perfil astrológico, de este conflicto? Ahora, justo esta Luna
formó un aspecto positivo a Marte, subrayando cómo Yugoslavia, que en
este caso se ha vuelto en realidad Serbia, no se halla dispuesta a
desistir demasiado fácilmente de su posición a pesar del indudable
despliegue de fuerzas harto mayor de la contraparte (Júpiter está en
aspecto muy positivo a Plutón).
Podemos decir de inmediato que difícilmente las tensiones se agotarán en
poco tiempo:
habiendo nacido con dos Planetas retrógrados, irán sólo a reducirse
cuando estos dos Planetas se vuelvan directos. Mercurio se ha vuelto
directo el pasado 2 abril a las 09:20 - y en efecto se comenzó a plantear,
aunque sea tímidamente, la palabra tregua - pero el paso de movimiento
retrógrado a movimiento directo siempre es índice de aceleración de los
acontecimientos y en efecto, aquel mismo día, también ha sido dada la
noticia del acercamiento a Yugoslavia de los barcos soviéticos que
comenzaban a doblar en el estrecho de Dardanelos. Pero es sobre todo
Marte, dada la naturaleza del acontecimiento, el Planeta fundamental para
observar.... Y Marte no se volverá directo hasta el próximo junio. Hasta
entonces sólo podrá haber una escalada de acontecimientos negativos
donde, si es augurable una tregua, señalada como ya hemos subrayado por
la Luna, no es igualmente deseable la reanudación de las negociaciones
que estarían destinadas a fracasar tristemente y de modo más dramático
que ahora.
Viene al caso preguntarse: ¿Por qué ha apuntado el astrólogo francés
su atención justo sobre el mes de julio y no sobre el de marzo, que ha
visto el triste nacimiento de este conflicto? Algunos, han hecho notar que
la palabra Mars también indica el mes de marzo que, además, toma su
nombre precisamente del planeta Marte.... Pero más allá de las
interpretaciones siempre muy discutibles a priori, de sus frases, una cosa
es segura: Nostradamus ha hablado claramente del mes de julio, mencionando
el séptimo mes del año 1999. Algunos estudiosos del adivino francés han
teorizado que, en virtud del diferente calendario, se deba entender el mes
de agosto, relacionándoselo con el famoso Eclipse total de Sol precitado,
pero nos sentimos en deber de disentir, un poco por las consideraciones
unidas al curso del Planeta Marte, ya exhaustivamente explicadas, y un
poco porque, como a menudo sucede, por observar el árbol se pierde de
vista el bosque. Es cierto, en efecto. que en agosto se producirá
este notorio eclipse de Sol.... pero es igualmente cierto que primero se
verificará otro eclipse, esta vez de Luna, el 28 de julio a las 11.35 GMT.
Y los efectos de los eclipses se sienten hasta 15 días antes y después
de verificarse el acontecimiento astronómico. Este eclipse es
extremadamente interesante: el Sol, conjunto a Mercurio, que se ha vuelto
retrógrado -reabriendo las problemáticas que han determinado el
conflicto - en Leo, signo que Ptolomeo asoció de manera particular a los
Jefes de Estado, se encuentra, además de obviamente en oposición a la
Luna en Acuario, en cuadrado con Júpiter, que en el interín se ha
desplazado a Tauro, a su vez en cuadratura a la Luna. Marte, en movimiento
directo, irá, de allí a poco, a recorrer otra vez los mismos grados que
tuvo cuando el conflicto se iniciara, tocándolos aproximadamente al
verificarse el segundo eclipse, es decir, el de Sol.
Nostradamus ha subrayado TODO el periodo en el cual Marte está en
Escorpio como un periodo especialmente negativo y precursor de
acontecimientos bélicos. Por cuanto terribles sean ahora los
acontecimientos, serán presumiblemente muy menores con respecto a la
importancia de aquéllos que se verificarán el próximo julio, es decir:
Un Eclipse de Luna, y no de Sol, hace pensar en la entrada en juego de los
países islámicos que, como bien sabemos, están estrechamente ligados a
los Ciclos Lunares (Para dar un ejemplo, el Rey Hussein de Jordania ha
desaparecido, en coincidencia con un eclipse de Luna y no de Sol, como
generalmente sucede para los Jefes de Estado y los Reyes). Indudablemente
es posible un paralelismo con otras situaciones de conflicto ocurridas con
anterioridad (“ .. . despertará al Rey del Angolmois”), paralelismo
que ya está en acto: muchos han notado efectivamente que los mayores
conflictos mundiales han tenido todos origen en los Balcanes, Milosevic ha
sido comparado con Hitler, los fenómenos astrales - la Gran Cruz -
reproducen otros fenómenos parecidos del pasado y la específica mención
de que “el terror vendrá del cielo” ¿ No hace pensar en los Stealth,
aviones fantasma, y sobre todo en los misiles así llamados inteligentes
de los que es solamente audible el silbido a su paso y a la consiguiente
detonación cuando se abaten sobre el objetivo? Además Clinton, siendo
Leo, vivirá de modo crítico ambos eclipses..., con el eclipse del
31.1.99 (que también como los del próximo julio y agosto, involucra el
eje Acuario/Leo), había abierto la vía, lo recordamos, al ataque a Irak
para redimirse frente a la opinión pública pero con muy escasos
resultados concretos. Entonces, la cuestión Balcanes está bien lejana de
encontrar una resolución positiva, independientemente que se establezca o
no el “cese el fuego”: hay que desear, en cambio, que el conflicto no
se propague ulteriormente también a otras naciones, primero entre todas
aquellas de Medio Oriente que podrían aprovechar el empeño americano
sobre otros frentes para organizarse de nuevo y abrir la vía a nuevas
guerras.
by Laura
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